Hyundai Elantra, el sedán surcoreano llega con un atractivo facelift.
Podemos decir que se trata de la generación “seis y medio”, porque en estricto rigor no estamos frente a una nueva plataforma ni mucho menos ante la presencia de una evolucionada motorización. Pero obviamente que hay mejorados elementos en el Elantra, avances que involucran con cierta timidez el ámbito del diseño exterior, con mayor fuerza la propuesta del habitáculo y de un modo convincente la oferta de equipamiento destinado al confort.
Nos llama la atención, positivamente claro está, que algunas marcas sigan apostando por el segmento de los sedanes, silueta que a razón de un año disminuye su participación en 10%. Es un hecho que para Hyundai el Elantra juega un rol decisivo, quizás no tanto en la venta a particulares sino que en el de las flotas destinadas al transporte ejecutivo, rubro que permite trazar una expectativa de ventas de mil unidades en un periodo de 12 meses.
El facelift exterior propone bellas soluciones, que rejuvenecen su apariencia. En este contexto destaca la proa equipada con una grilla tipo cascada, además de unas cortinas aerodinámicas que se dejan ver en los costados del parachoques; parecen neblineros pero en realidad son luces de posición triangulares.
La zaga ostenta iluminación mediante ledes, equipamiento que no está presente en todas las versiones, aunque sí podemos citar que al interior de ese respingado tercer volumen se esconde un baúl sumamente amplio (407 litros). Las dimensiones se mantienen casi intactas, anunciándose cinco centímetros extras en la longitud (4.620 mm), lo que por supuesto es atribuible al prominente parachoques.
En la cabina los aciertos estéticos están a la orden del usuario, terreno en el que debemos reconocer el buen trabajo realizado por los diseñadores. Además de amplio este habitáculo exuda elegancia, a pesar de que sus materiales no son de alta calidad y que se abusó del plástico en el sector del tablero; las ornamentaciones denotan un excelente gusto.
En la lista de equipamiento debuta una pantalla táctil de 7”, monitor que permite acceder a las plataformas Apple CarPlay y Android Auto, y que asume el rol de pantalla de retroceso, con guías de aproximación, dispositivo que está incluido en todas las variantes. Y por lo mismo nos parece un grave error que en el nivel de entrada no esté presente el ABS, ayuda electrónica de la que no se puede prescindir cuando se anuncia un precio de $10.590.000.
En el apéndice técnico se dispone de un bloque gasolinero de 1.6 litro, bloque que produce una potencia máxima de 128 CV a 6.300 rpm y un torque de 157 Nm. En lo que respecta a rendimiento se declara un promedio de 15,5 km/l cuando está unido a la caja mecánica de seis marchas, y de 15,3 km/l cuando actúa coligado a la transmisión automática de seis velocidades.
El remozado Elantra llega a nuestro país con un precio tope de $14.290.000, y con niveles de dotación denominados SEL, Value y Premium. La verdad es que este sedán surcoreano no la tiene fácil, porque entre sus rivales se cuentan el Mazda3, Kia Cerato, Subaru Impreza y Toyota Corolla.