Ford Fiesta, el remozado hatchback ingresa el mercado chileno.
El primer producto global de Ford, presentado en 2010, y cuyo desarrollo está basado en la filosofía “Go Further” acaba de renovarse. Se trata de una leve actualización estética que afecta positivamente al frontal, sector que asume el aspecto que exhiben los ejemplares Focus y Fusion, aunque en el caso del Fiesta se recurrió a una celosía tipo panal de abejas para cubrir la mascarilla hexagonal.
Por el momento la mentada actualización involucra sólo a la tipología hatchback, formato que refuerza su carácter deportivo y que llega en tres versiones, todas equipadas con un motor gasolinero Ti-VCT de 1.6 litro (120 CV); se ofrece además una transmisión mecánica de cinco velocidades.
Tomando como base la esencia juvenil de este producto, la conectividad es uno de los aspectos que más se han reforzado. Es por esto que el Fiesta incluye el sistema de infotenimiento SYNC, dispositivo que pasa a su tercera evolución (SYNC3) cuando se opta por un nivel de equipamiento intermedio; se accede a sus muchas funciones mediante una pantalla táctil de 6,5”. El control por voz posee una gramática simplificada y un vocabulario más amplio, logrando reconocer más de 10.000 comandos.
En lo que respecta a seguridad el Fiesta establece un nuevo estándar dentro de su categoría. Revisando la versión tope de gama, apellidada Titanium, nos encontramos con frenos ABS+EBD, cámara de retroceso, controles de estabilidad y tracción, además de siete airbags. A lo anterior se suman los anclajes Isofix, el sistema de alerta postcolisión y la alarma volumétrica.
Entre los rivales del Ford Fiesta están los hatchbacks Opel Corsa, Peugeot 208, Renault Clio y Skoda Fabia. La gama de versiones anuncia precios oscilantes entre $8.690.00 y $10.790.000, un rango bastante competitivo tomando en cuenta los valores y el equipamiento informado por algunos de sus oponentes.