Maserati Levante, llega a Chile el primer SUV de la firma italiana

Lo primero que llama la atención de este modelo, es su nombre. La denominación Levante se refiere al cálido viento mediterráneo que puede transformarse de una ligera brisa a una fuerza irresistible de la naturaleza en un instante. De un modo resumido, una brisa que en un parpadeo se convierte en un fuerte vendaval.

Pero dejando atrás la prosa, es importante decir que se trata nada menos que del primer SUV fabricado por la firma del tridente. Lo sostiene una plataforma derivada del Ghibli, con ciertos ajustes en la rigidez estructural y en las cotas elementales; el Levante mide 5.003 mm de largo y 1.968 mm de ancho. Estos guarismos anuncian que se trata de un automóvil portentoso, siendo incluso más grande que un Cayenne (4.855 mm).

El modelo debutó a principio de año en el Salón de Ginebra, prometiendo en ese momento una exquisita mezcla de deportividad con movilidad fuera del asfalto. Para lograrlo, el fabricante recurrió a sus motores V6 más eficientes: turbo gasolinero de 3.0 litros con 350 o 430 caballos, más un turbodiésel también de 3.000 cc pero con una potencia máxima de 275 CV. La transmisión automática de ocho velocidades, que está presente en las tres opciones de motorización, fue firmada por ZF y está acompañada por un sistema de tracción integral que prioriza el envío de fuerza motriz a los neumáticos traseros cuando las condiciones viales no son complejas.

Está demás decir que el nivel de equipamiento es superlativo y que los materiales empleados en la cabina son de lo mejor. La escala de precios, que presenta un punto de partida en US$87.000 y alcanza su tope en US$135.000, está a la altura de lo que ofrece este extraordinario producto.